La mayor de las islas Baleares es uno de los destinos más populares del Mediterráneo, y ¡razones no le faltan! Cada año, millones de viajeros vienen a Mallorca atraídos por el buen clima y las preciosas playas, pero lo cierto es que la lista de cosas que ver y hacer es mucho más larga. Descubrir el rico patrimonio cultural de sus pueblos y ciudades, adentrarse en el mágico mundo subterráneo de las cuevas del Drach o explorar el paisaje natural de la sierra de Tramontana, son solo algunas de las muchas experiencias que puedes disfrutar durante tus vacaciones en Mallorca.
Las mejores actividades y excursiones en Mallorca
1. Explora Palma de Mallorca
Palma, la capital de la isla, es una ciudad vibrante, repleta de lugares de interés histórico y cultural. Piérdete por las callejuelas de su casco antiguo y déjate maravillar por la arquitectura de los edificios más emblemáticos, las bonitas plazas y las tiendas de moda. Una de las atracciones más destacadas es la Catedral de Mallorca. Esta joya del gótico mediterráneo, situada frente al mar, es una de las catedrales más altas de Europa, y sus vidrieras y rosetones son una maravilla. El Castillo de Bellver y el Palacio Real de La Almudaina también son de visita obligada.
2. Maravíllate con las Cuevas del Drach
Adéntrate en el mágico mundo subterráneo de las Cuevas del Drach, una de las atracciones más icónicas de las Islas Baleares. En su interior, las maravillosas estalactitas y estalagmitas te dejarán con la boca abierta. Por si esto fuera poco, también podrás ver el Lago Martel, uno de los lagos subterráneos más grandes del mundo. Para los viajeros que se queden con ganas de más, en Mallorca hay otras cuevas espectaculares que también vale la pena visitar, como las Cuevas de Artá y las Cuevas de Hams.
3. Viaja en el tiempo a bordo del tren de Sóller
Este precioso tren de madera, que conserva el mismo aspecto desde su inauguración en 1912, es el medio de transporte ideal para descubrir los paisajes del interior de Mallorca. Las excursiones parten del centro de Palma en dirección al precioso pueblo de Sóller, y durante el recorrido se atraviesa la Sierra de Tramuntana, declarada Patrimonio de la Humanidad en la categoría de Paisaje Cultural. Una vez en Sóller, puedes continuar el trayecto en tranvía hasta el Puerto de Sóller.
4. Descubre Valldemossa y la costa oeste
Valldemossa, uno de los pueblos más bonitos de la isla, se encuentra en plena Sierra de Tramuntana, a 400 metros sobre el nivel del mar. Su pintoresco núcleo urbano parece sacado de un cuento, y entre los lugares de visita obligada cabe destacar el antiguo monasterio de La Cartuja. La costa oeste de la isla es bastante escarpada, y está salpicada de imponentes acantilados, recónditas calas y pequeños pueblos llenos de encanto. La finca de Son Marroig en Deià y la playa de Sa Calobra son otras dos paradas imprescindibles.
5. Disfruta de una cata de vino en Binissalem
Las excursiones a la región vitivinícola de Binissalem son una de las actividades más populares en Mallorca. Además de recorrer los encantadores viñedos, explorar bodegas históricas y degustar algunos de los mejores vinos de la isla, aprenderás un montón de datos interesantes sobre las variedades de uva locales y los procesos de elaboración. Muchos tours incluyen la posibilidad de disfrutar de una comida tradicional, perfectamente marinada con vinos de la zona.
6. Haz una excursión al Cabo de Formentor
El Cabo Formentor es el punto más septentrional de la isla, y sus dramáticos acantilados son uno de los paisajes más impresionantes de Mallorca. Las visitas guiadas suelen hacer una parada en alguno de los miradores de la zona, como por ejemplo el mirador es Colomer. Y después de maravillarse con las vistas, nada mejor que relajarse en la playa de Formentor, famosa por su arena blanca y agua cristalina.