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Auschwitz-Birkenau es un escalofriante recordatorio de los actos de terrorismo, genocidio y atrocidades más horrendos del mundo. Construido por los nazis en 1940 en los suburbios de Oswiecim, se estima que más de un millón de personas de 28 nacionalidades diferentes perdieron la vida trágicamente aquí. Reconocido por su importancia histórica, este sitio ha sido parte de la lista del Patrimonio Mundial Cultural y Natural de la UNESCO desde 1979.

El recorrido ofrece una experiencia inmersiva en ambas secciones del campo: Auschwitz y Birkenau. Un guía experto, que habla con fluidez uno de los seis idiomas disponibles, lo acompañará durante toda su visita. El servicio incluye un traslado compartido desde su alojamiento en Cracovia hasta los sitios y entre ellos, lo que garantiza un viaje sin problemas. También se incluyen las entradas, lo que le permite concentrarse en absorber la profunda historia que lo rodea.

Ventajas

Verás las antiguas cámaras de gas y los barracones de los prisioneros.
Aprenda sobre la historia de Auschwitz y el Holocausto con un guía experto
Combina la comodidad de un paquete completo con la recogida en tu puerta.

Información importante

Accesibilidad:

No apto para personas con movilidad reducida debido a la distancia moderada a caminar durante el recorrido.
No apto para sillas de ruedas

No permitido:

No se permite el ingreso al recinto del museo con mochilas o maletas de gran tamaño. No se permite el ingreso con objetos punzantes ni peligrosos.

Sepa de antemano:

El horario que prefiera no está garantizado y es solo orientativo. El Museo de Auschwitz decidirá en última instancia el horario de visita según la disponibilidad del guía.
Reserve un día entero para su visita y prepárese para entrar temprano. El tiempo de visita puede variar hasta 5 horas con respecto a su horario preferido.
Según los requisitos del Museo, todos los participantes deben proporcionar su nombre completo y datos de contacto como parte de la reserva.
Los nombres deben ser idénticos a los que figuran en la identificación con fotografía que los visitantes deben presentar para ingresar al Museo.
El servicio de atención al visitante del monumento determina el ritmo y la duración de las visitas en función de las condiciones meteorológicas.
En Auschwitz no hay ningún código de vestimenta . Sin embargo, se espera que los visitantes se vistan de manera respetuosa, teniendo en cuenta la importancia histórica del lugar.