Prepárese para una aventura que recoge las raíces romanas y el pasado pirata de Túnez. Visitará un anfiteatro similar al de Roma con una visita a El Jem, un antiguo coliseo donde antaño se celebraban los juegos de gladiadores. A continuación, sumérjase en las olas para disfrutar de una tarde de espadachines en el mar que incluye paradas para nadar, almuerzo y aperitivos a bordo de una réplica de una galera pirata.
El Jem, Patrimonio Mundial de la UNESCO, está empapado de historia. Le cautivarán sus muros tallados en piedra, sus finos arcos y su fachada de tres pisos, testimonio de gloria de lo que fue el Imperio Romano. Siéntese en el estadio milenario y admire la arena que hay debajo, tal y como se hacía en tiempos pasados.
A continuación, zarparemos del puerto de Monastir para adentrarnos en el Mediterráneo, como hicieron los piratas berberiscos durante siglos. Pero mientras ellos infundían el miedo en comunidades costeras europeas tan lejanas como Islandia, nosotros saldremos a divertirnos de todo corazón: habrá paradas para zambullirse en el mar y nadar, y tiempo de sobra para secarse a bordo mientras se toma un refresco o un tentempié.
